martes, marzo 07, 2006

La destitución de Ibarra

Este es un post en primera personal y espero sea una excepción. Después de pensarlo y repensarlo, nunca me sentí convencido para tomar una posición en el juicio contra Aníbal Ibarra. Creo sí, que siempre estuve más cerca del "no" a la destitución. Por diferentes analogías con casos similares, por fundamentos escuchados, por razones que explicarla harían este post interminable. Sin embargo, tengo dos reflexiones. Una crítica y una que me esperanza en cierto sentido. La primera me genera cierta inquietud y se refiere a las primeras palabras que le escuché decir al abogado José Iglesias. El sostuvo, antes que nada, que ayer había "dos muertos políticos", en referencia a Ibarra y a la legisladora Beatriz Baltroc. Me pareció desafortunada la expresión, hasta con un tono vengativo. Lo esperanzador fue la fundamentación de dos votos. El del kirchnerista Helio Rebot y, en especial, el de la ex radical Florencia Polimeni que -salvo por la cita a El Padrino- fue emocionante y, como bien escuché decir luego a la periodista Lorena Maciel, fue casi una clase de ciencias políticas. Los discursos fueron muy superiores a los lamentables alegatos, que estuvieron plagados de politiquería de baja estirpe y estruendosas acusaciones personales, con el del lamentable Jorge Enríquez a la cabeza. Esta vez, la mayoría de los fundamentos fueron sólidos, incluso algunos con los que no coincidía. Mientras Gerardo Romagnoli me confirmó decepciones, Rebot y Polimeni me sumaron dudas, pero éstas, en este caso, son bienvenidas.

Daniel Seifert